21/11/17

Prozac no es lo mismo que Proscar [21-11-17]


Prozac no es lo mismo que Proscar

  • El coste medio por estancia debido a una confusión con el nombre de los medicamentos es de 2.722 euros
  • Los expertos proponen reforzar las medidas para evitar estos errores

No es lo mismo Almax que Atarax, ni Fluconazol que Fluimucil, ni Proscar que Prozac. La confusión entre nombres parecidos de los fármacos es una causa muy frecuente de los errores de medicación, junto a los envases parecidos. Aunque en España se desconoce la magnitud real de este problema, varios estudios coordinados por el Instituto para el Uso Seguro de los Medicamentos (ISMP España) apuntan que estas equivocaciones tienen un coste medio por estancia próximo a 3.000 dólares (unos 2.722 euros).

La similitud puede encontrarse entre dos nombres comerciales (por ejemplo, Sumial y Luminal), entre dos principios activos (dopamina y dobutamina) o entre una marca y un principio activo (Rohipnol y ropinirol). El ISMP español tiene un listado de seis páginas repletas de denominaciones de medicamentos con similitud ortográfica y fonética asociados a errores comunicados al sistema de notificación de incidentes de este tipo.

"Estos fallos ocurren de forma más habitual en las personas mayores, que son pluripatológicas y, por lo tanto, plurimedicadas", apunta María Segura, jefe del servicio de Farmacia del Hospital de Móstoles de Madrid. No obstante, las confusiones entre nombres de medicamentos también pueden derivarse de la práctica profesional, por ejemplo, cuando la prescripción manuscrita es poco legible. Como señala la experta, "sólo conociendo y analizando los errores se pueden desarrollar estrategias" dirigidas a evitar que vuelvan a producirse. Entre otras, la prescripción electrónica. Sin embargo, no es suficiente, ya que si dos fármacos tienen una denominación similar y aparecen próximos en los listados informáticos, aumenta el riesgo de elegir el equivocado, especialmente si el indicado es uno nuevo o poco habitual.

De ahí la importancia de sensibilizar a los pacientes y actualizar el listado de medicamentos con nombres parecidos susceptibles de causar error. Además, los expertos recomiendan utilizar siempre el nombre comercial además del principio activo, realizar prescripciones electrónicas, evitar el almacenamiento de fármacos con riesgo elevado de confusión en lugares próximos o revisar los tratamientos con los pacientes.

También se plantea la posibilidad de implantar un sistema automatizado de verificación, mediante código de barras, que permita garantizar la selección correcta del medicamento. En este sentido, el equipo de farmacología del Hospital de Móstoles acaba de recibir un premio del Ministerio de Sanidad por la implantación de buenas prácticas en seguridad del paciente. La iniciativa, detalla Segura, consiste en el desarrollo de un sistema para que "tanto los médicos de atención primaria, como los de especialidades (cuando el paciente ingrese, por ejemplo), como los farmacólogos estén coordinados y tengan en cuenta la medicación que tiene el paciente, con el objetivo de evitar errores de medicación como las duplicidades".

Otra de las medidas que ya se ponen en práctica es el uso de mayúsculas, expone la farmacóloga del Hospital de Móstoles. Por ejemplo: ProZAR y ProSCAR. Sirve precisamente para destacar las letras que diferencian una denominación de otra.


Un riesgo real

Diversos estudios señalan que la morbilidad y la mortalidad producidas por los medicamentos similares son muy elevadas. Como argumenta la especialista en relación a los ejemplos con los que arranca este texto, Almax no tiene nada que ver con Atarax. El primero es un antiácido para el reflujo gastroesofágico y el segundo, un antihistamínico para tratar algún tipo de alergia. "Si alguien toma Atarax creyendo que es Almax, pueden afectarle efectos secundarios con los que no cuenta, como la somnolencia y, por lo tanto, no puede seguir recomendaciones como no conducir".

En cuanto al binomio Fluconazol y Fluimucil, uno es un antifúngico para infecciones por hongo y el otro un expectorante. "Si un paciente que necesita el antibiótico se toma Fluimucil, la infección se agravará. En el caso contrario, quien necesite el expectorante y, por error, ingiera el Fluconazol, no facilitará la salida de la mucosidad al exterior y además su organismo podrá generar resistencia al tomar un antibiótico que no necesita", explica Segura..

Evidentemente, no es lo mismo un antidepresivo que un fármaco para la hiperplasia benigna de próstata. Sin embargo, la similitud de sus nombres pueden dar lugar a error: ProZAC y ProSCAR. La introducción de mayúsculas ayuda a evitarlo.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario